Azul del Negro

Lacerdaes al ataque

Posteado el 21 Feb 2016 por Walter Marquez   |   ,   

Llegamos a febrero, e igual que el año pasado, se me dá la posibilidad de realizar una aventura pesqueril de mi tan mentado Master series personal. Gracias a mi amigo Angel Rossi, logramos cerrar fecha para ir en busca de una especie que la tenía entre ceja y ceja. La tararira azulada, también llamada tararira tornasol o hoplias lacerdae es una especie totalmente diferente a nuestra amada malabaricus y no solo por los tamaños que alcanza sino tambien por la forma de moverse y desarrollarse. Más aún, lo que la diferencia notablemente es la forma de pescarla y la pelea que genera su encuentro.

La Central Hidroeléctrica Constitución, también conocida como Represa de Palmar, es una central hidroeléctrica propiedad de la empresa estatal UTE de Uruguay situada en el curso del río Negro. Fue puesta en funcionamiento el 27 de agosto de 1982. Se ubica a 72 kilómetros de Mercedes. Puede accederse a la represa y al pueblo Palmar tomando por la ruta Nº 14 y, posteriormente, por la ruta Nº 55 que pasa por encima de la represa, uniendo al departamento de Soriano con el departamento de Río Negro.

Llegamos bien entrada la noche, pero antes de irnos a dormir en los preciosos cuartos del Hotel del Parador Municipal, pasamos por un puestito donde comimos los mejores chivitos uruguayos que probé en mi vida. Cansados a la cama con la ansiedad de la incertidumbre,tanto de que íbamos a pescar (dorados o azules) como de como lo íbamos a hacer.A la mañana siguiente desayuno frugal en el restaurante del Parador y a encontrarnos con quienes oficiarían de guias nuestros Juan Laborde y Juan Carlos Silva. Saludos de rigor y ansiedad mediante nos dirigimos hacia la imponente represa donde aguas abajo de ella largamos la lancha y nos preparamos para la aventura.

  
  

Nos pusimos a navegar aguas abajo y comenzamos a ver un río precioso con muchas vegetación en sus costas y varios arroyos menores que le van desembocando. Como la pesca del dorado en la usina propiamente dicha se venía dando sólo con carnada preferimos empezar con las hoplias lacerdaes.

Fuimos entrando a cuanta boca de arroyo encontrábamos donde lanzábamos señuelos que profundicen buscándolas en el fondo de piedras. Yo probé con el arashi 10 y el mag wart ambos de storm y el BCX minnow de rapala sin resultado alguno. Las bichas brillaban por su ausencia y los Juanes, nuestros guías, revisaban estrategias. Salimos a Río abierto a golpear las correderas porque a veces o hay dorado en ella o hay hoplias en el remanso posterior que se forma. Nada.

Despues de una horita y media de dudas llegó el llamado que lo cambió todo. Desde la costa nos avisaron que apagaron la Central Eléctrica y que por ende iba a dejar de generar energia. En dos segundos estábamos llegando de nuevo al embarcadero y la vista ya impresionaba, el río habia bajado por lo menos metro y medio y ya la rampa estaba fuera del agua. Con mucho trabajo manual y paciencia los Juanes pudieron subir sus lanchas para estar otra vez en tierra. La idea era, como ya el río aguas abajo era inpescable, ir aguas arriba, al lago formado por la represa y buscar las azules ahi.

     

Ya pasados al otro lado de la represa comenzamos la navegada cruzando todo el lago hasta casi el otro lado. Ahi llegamos a unas costas pedregosas con una profundidad media de 2 metros, donde Juan nos dice que esa es la profundidad ideal para buscarlas. Apagó el motor y comenzó una lenta derivada paralela a la costa para que podamos lanzar señuelos paletones que vayan golpeando el fondo. En ese instante me di cuenta de lo loco de esta pesca, tarariras al golpe en agua abierta que corre, totalmente lo opuesto a como se pescan sus primas las malabaricus de la argentina.

Fuimos tanteando el terreno con lances largos y precisos, pero sin tener la seguridad de a que nos enfrentábamos. Yo particularmente sentía que estaba pescando pavones en colombia, como hacia ya un año, por el estilo de pesca que realizábamos. Para estos primeros lances y viendo que era lo que Juan quería que hiciéramos decidí poner el hot´n tot de Storm paleta plástica fija.

Al cabo de un rato sin suerte, en uno de los lances siento que el señuelo deja de vibrar en la recogida, trato de apurarlo y de golpe siento que lo tironean, intento clavar y braceo el aire porque la línea salió disparada como un misil hacia la lancha, cuando logro recoger lo suficiente ahi si pego el cañazo y le acierto en tensión a la linea que explota de rigidez y me saca a pasear a una velocidad increíble. Ya pasado al otro lado de la lancha, ella, mi primera lacerdae se digna a pegar un salto majestuoso y volver a ponerme en tensión de línea. Al cabo de unos minutos afloja su pelea y Juan con el copón, elemento vital si los hay en esta pesca, la iza para transformarse en mi primera azul.

  

Ya emocionado por la emoción de semejante captura volvimos a hacerle una pasada a la misma costa. Al cabo de un rato, hot n tot que deja de vibrar y nuevamente buscando el contacto de la línea con el pez, sale disparado. En medio de la pelea le digo a Martin que estaba al lado mío que me había quedado corto en la clavada y que la podía perder. Y asi fue, salto descomunal de la lacerdae y señuelo escupido de la boca.

Seguimos haciendo la pasada en la costa y con mi endiablado hot n tot tengo mi tercer pique, esta vez y ya empezando a entender de que viene la cosa, apenas deja de vibrar y se afloja recogo a toda velocidad y alcanzo a afirmar la línea clavándola con todas mis fuerzas. El misil salió despedido regalándome una pelea monumental y unos saltos para no olvidarme nunca. Gracias a Dios, alcancé a sostenerla hasta que el copo estuvo en el agua y se transformara en la mas grande de toda la salida. Una cosa que noté en estas capturas es que las hoplias salian con el señuelo del labio, jamás se lo tragaron, como si se acercaran a su presa, lo tomaran con su pequeña boca hasta que decidieran tragárselo.

Hicimos una cuarta pasada y aparecieron varias sorpresas. Primero una hoplias malabaricus que sacó Martin y que nos mostró que esta especie tambien está presente en la zona. También un cabeza amarga glotón que se atragantó con un señuelo mas grande que él mismo. Y por último Martín tuvo su premio logrando su primera lacerdae. Ya habiendole sacado el jugo al máximo a la zona dimos por concluída la jornada con un final mas que aceptable tras lo accidentoso del comienzo.

     

Nuevo día, nuevas lacerdaes.

Segundo día y con la comprobación de que la represa seguía sin generar la descición de que hacer fue fácil, a repetir jornada en el lago. Por ello comenzamos temprando buscando la misma costa que tuvimos un excelente final el día anterior.

Primer pasada y mi hot´n tot recibe un tremendo ataque que no logro afirmar y termina antes de empezar. A los cinco minutos en una pequeña bahía explota las tres cañas a la vez, una pequeña azul salta y me escupe el señuelo, Martin lo falla porque el pez le toma el engaño en los pies y no le da margen de recorrida. Por suerte Angel y su dt10 de rapala, que no había tenido casi ataques hasta ahi, tiene una poderosa corrida , que logra transformar en recuerdo fotográfico antes de liberarlo.

Remontamos la costa y largamos una nueva pasada. Esta vez yo tengo un pique sutil que terminó siendo un cabeza amarga glotón. Al final de la pasada Angel primero y Martin despues lograron capturas de lacerdaes medianas que atacaron sus DT10.

     

Pasada la mañana ya no tuvimos mas respuestas en la costa rendidora asi que decidimos ir hacia otra costa mas alejada, mas profunda con un promedio de 4,5 mts y que despues de una primera pasada sin respuestas decidimos cambiar la técnica. Asi apareció a nuestra consideración la posibilidad de realizar unas pasadas en trolling buscando velocidad de tracción de los señuelos y profundidad en la recorrida.

En la primer pasada yo puse un señuelo muy paletudo, el T.D Super Crank de Daiwa. A los cinco minutos de comenzar el trolling explotó mi caña con una hermosa lacerdae que me bailó un buen rato, mas que la traje desde bastante lejos. Aunque no es la técnica que mas me gusta el trolling suele ser efectivo y con estos petardos igual te permite disfrutar de un buen rato de pelea.

Con este buen augurio empezamos a darles pasadas a la misma cancha. En las siguientes 3 pasadas Martín tuvo ataques que se transformaron en dos capturas usando el DT10 Angry bird de Rapala, un hallazgo. Al ver esto Angel y yo pusimos sendos DT10 color Perch que era lo mas parecido que teníamos al on fire. Asi la siguiente captura me tocó a mi con otra lacerdae imponente tanto en tamaño como en pelea.

     

Era ya pasado el mediodía cuando al ver que se cortó el pique en el trolling nos fuimos a una costa con sombra a comer algo y despansar un ratito del tremendo sol que nos acechaba. Ahi pudimos hacer algunos análisis de lo raro de esta pesca, de tarariras con cosas de dorado, surubí y tucunaré, pero nada de tararira. Todo un nuevo aprendizaje.

A la tarde y con el tiempo corriendonos porque queríamos volver temprano, fuimos directamente a nuestra costa pedregoza y rendidora, donde primero Martín sacó la última azul de la jornada. Para regresar volvimos haciendo trolling en las costas mas cercanas a la represa y ahí Angelito sacó dos tarariras pero de las malabaricus que dieron por cerrada la jornada y también la salida. No puedo dejar de agradecer tanto a mis dos grandes compañeros de esta aventura Angel y Martin, como asi a esos tipos divertidos que nos acompañaron en la lancha y que sólo pueden saber donde encontrar una tararira en un océano, gracias Juan Laborde y Juan Silva de Dorados Uruguay.

     

Cumplí otro Grand Slam de los que tengo trazados para motivarme a seguir mejorando, aprendiendo y conociendo. Esta vez fue el Negro del Uruguay, como lo fue, exactamente un año atras el Bita de Colombia. No hay nada mas lindo que proponerse sueños, soñarlos despierto y finalmente por hacerlos realidad.

Notas Recomendadas

Por que devolver

Muchas veces se discute si el pescador deportivo es realmente el culpable o no de la depredación de nuestros peces. Muchas veces la conclusión es no. Esto no nos exime de ser responsables de cuidar el recurso que tanta vida nos da. Un pez devuelto es quizas la futura captura de tu hijo

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